Está bien no ser tan productivo durante la cuarentena; los expertos en salud mental lo confirman
Reconócelo: no te apetece hacer esa clase de yoga en Instagram, cocinar ese pan de plátano, ni sumarte al nuevo reto viral de Tik Tok, la cuarentena por coronavirus nos está quitando energía, ánimos y, según los expertos, también te quedaste sin ganas de realizar aquellas actividades que, si no fuera por esta situación, harías sin dudarlo.
Entonces, ¿qué no está pasando?, ¿por qué no queremos hacer aquellas dinámicas, ejercicios o acciones que hace unos meses nos emocionaban tanto?, La cuarentena sí tiene algo que ver con nuestra falta de interés y energía? y más de lo que te imaginas.
Todos estamos viviendo situaciones diferentes. Sin embargo, en las últimas semanas hay un factor que compartimos (y que nos está haciendo perder la cabeza): la urgente necesidad de adaptar nuestro viejo estilo de vida a uno que nos mantiene confinados en nuestros hogares.
Al parecer, la cuarentena está resultando ser mucho más estresante y desorientadora de lo que se anticipaba. Incluso ha llegado a modificar nuestros ciclos de sueño, las actividades diarias y hasta la forma en la que nos apropiamos del espacio público y social.
Los humanos somos seres sociales que, en mayor o menor medida, necesitamos de las interacción con otros. La convivencia y los espacios comunes que compartimos con otras personas impactan positivamente nuestro desempeño y salud física y mental.
Cuando de un momento a otro nos vemos obligados a abandonar todos estos rituales de socialización, es normal que nuestro cuerpo y estado emocional se vean afectados, lo que genera sentimientos de angustia y depresión que, inevitablemente, impactarán en nuestra productividad.
De acuerdo con Constanza Noriega, psicóloga y experta en productividad, esto se debe a la incertidumbre generada por una emergencia sanitaria de esta categoría. Explica que el sentimiento de no querer hacer nada nace del duelo colectivo de tener que renunciar “voluntariamente” a la cotidianidad.
quote: “Nos vemos obligados a quedarnos en casa, y eso nos genera mucha angustia. La tristeza viene de sentir que la situación te ha arrebatado el control de tu propia vida”
La idea de ser productivos, incluso en medio de una crisis mundial, es un reflejo de la cultura en la que estamos inmersos. Una donde el tiempo de ocio se equipara a tiempo inútil, por tanto, se le piensa como una pérdida de tiempo.
Esto es confirmado por Anna Llebaría, experta en productividad con certificación por la Asociación Española de Coaching, quien argumenta que la constante presión social de siempre estar activos puede generar sentimientos de ansiedad y frustración que, a largo plazo, pueden afectar la salud emocional.
Por último, la doctora y periodista Anne Helen Petersen, argumenta a través de un artículo para The New York Times, que el origen de esta mentalidad se remonta a la falsa creencia de que las nuevas generaciones deben estar todo el tiempo activas y ocupadas, debido a todas las herramientas digitales que manejan.
Por lo tanto, es normal que, en medio de toda esta crisis, no tengas ganas ni ánimos para realizar aquel reto de los 24 libros que debes leer antes de que acabe la cuarentena, ni de ver las miles de películas que tienes reservadas en tu lista de Netflix. Está bien y no deberías de sentirte preocupada por eso.
La clave para ser productivo sin descuidar tu salud mental
Durante estas semanas, es probable que puedan surgir todo tipo de sentimientos: desde tristeza, rabia e ira, hasta miedo y preocupación, son sentimientos que son válidos y que está bien sentir, la clave está en expresarlos y no esperar a que se marchiten y se guarden en nuestra mente.
La psicóloga y sexóloga, Judith Viudes menciona que “lo importante es no quedarse estancado en esas ideas y emociones. Lo mejor que podemos hacer es aceptar la situación y responsabilizarnos de lo que sí está en nuestra manos, en lugar de bloquearnos con aquello que no podemos cambiar”.
Puede ser un buen inicio para explorar en aquellos miedos y vacíos que intentamos llenar, aun cuando tenemos la libertad de salir al aire libre. Date un momento para entender qué es lo que quieres hacer y confirmar si de verdad quieres hacerlo. No te sientas presionado, el tiempo es tuyo y de nadie más.
Retoma hobbies, motívate a hacer tareas o simplemente relájate y realiza tus actividades favoritas. Solo procura que esto nos afecte tus dinámicas y rituales diarios, recuerda que tener una rutina de auto cuidado y contención emocional también son gestos de amor propio.
Es imposible que alguien pueda adaptarse a este cambio de la noche a la mañana: está bien, es normal y no tiene nada de malo. El hecho de que estés en cuarenta no significa que debas volverte un experto en el arte de la meditación, que debas aprender cuatro idiomas o que te conviertas en la competencia de Bárbara de Regil.
Es normal sentir que la situación nos sobrepasa y nos abruma. Pese a tener que cumplir con ciertas responsabilidades, habrá días que no podamos hacer mucho más. Y eso está bien, no te preocupes.
Por último, recuerda que antes de ser “productivo” eres un ser humano con emociones, sueños y aspiraciones. No dejes que el estrés se apodere de tu paz mental y de tu hogar.
En medio de esta contingencia, es nuestra responsabilidad cuidar de nuestra salud mental y emocional. No lo olvides.
Y tú ¿cómo pasas el tiempo durante esta cuarentena? Cuéntanos en los comentarios.
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