Biden apuntala promesas contra el cambio climático con los planes más contundentes en la historia del país
Después de la devastadora gestión de Trump, que negaba la existencia del cambio climático, la gestión de Biden en estos primeros 100 días de gobierno hacen que el mundo respire un poco más aliviado.
A diferencia de su predecesor, Biden cree que el cambio climático es “la crisis existencial de nuestro tiempo” y ha actuado en concordancia: reintrodujo a EEUU en el Acuerdo de París, el gran pacto contra el calentamiento global en el que están presentes todos los grandes países (y del que EEUU se había retirado) el mismo día que asumió el gobierno, cuando firmó una tanda de decretos que colocaron el problema medioambiental como una piedra angular de su gobierno.
Consciente de que ni siquiera un esfuerzo titánico del mundo desarrollado podría servir ya ante la brutal amenaza del calentamiento global, y del papel de liderazgo que ha de tomar EEUU, Biden formó un Grupo de Trabajo Nacional sobre el Clima y nombró a destacados defensores medioambientales para ocupar puestos de liderazgo en las agencias federales, entre otras acciones.
Sin embargo, con una estrecha mayoría demócrata en el Congreso y un Tribunal Supremo conservador, no será fácil que la istración aplique toda su agenda medioambiental, tal y como recuerdan expertos como los que forma este de la Universidad de California en Los Ángeles (UCLA).
Desgranamos los principales planes y retos que Biden tiene por delante: