Así es cómo puedes hacer tu propia leche de almendras en casa
Hay tanta información contradictoria con respecto a la leche, que si es saludable, que si no. Y luego están las personas que tienen intolerancia a la lactosa y directamente no pueden consumirla.
Si eres de las que ante la duda prefiere abstenerse, te encantará conocer que así es cómo puedes hacer tu propia leche de almendras en casa.
¡Siempre es práctico tener una alternativa saludable a mano!
Ingredientes
- 1 taza de almendras crudas, remojadas en agua
- 3,5 tazas de agua mineral sin gas o filtrada
- 2 dátiles grandes (opcional)
- 1 vaina de vainilla, picada (o 1 cucharadita de extracto de vainilla)
- 1/4 cucharadita de canela
- Una pizca de sal fina, para mejorar el sabor
>Qué rico: Ni vaca, ni cabra... leche de avena
Preparación:
Coloca las almendras en un recipiente y cúbrelas con agua. Es mejor dejar en remojo durante la noche (durante 8-12 horas) en el agua, pero será suficiente remojarlas durante 1-2 horas si estás apurada.
Lava y escurre las almendras, y colócalas en el vaso de la licuadora junto con el agua filtrada, los dátiles sin carozo, y la vaina de vainilla picada. Mezcla en la velocidad más alta durante 1 minuto más o menos.
Coloca una bolsa de tela o repasador sobre un colador fino apoyado en un tazón grande y vierte lentamente la mezcla de leche de almendras.
Aprieta suavemente la parte inferior de la bolsa para liberar la leche. Te tomará unos 3-5 minutos exprimir toda la leche.
Enjuaga la licuadora y vierte la leche de nuevo. Añade la canela y una pizca de sal marina, y licúa a velocidad baja para combinar.
Vierte la mezcla en un frasco de vidrio para almacenar en el refrigerador hasta por 3 a 5 días.
Agita el frasco muy bien antes de usar, porque la leche de almendras se separa cuando se asienta.
Ten en cuenta a la hora de prepararla que si la vainilla o los dátiles están muy secos/rígidos, puedes remojaros en agua para ablandarlos antes de usar.
También puedes utilizar otro edulcorante, como el jarabe de arce. Lo mismo sucede con la vainilla; no dudes en utilizar el extracto de vainilla para un sabor más sutil de vainilla.
¿Te gustó la leche de almendras? Prueba también hacer leche de semillas de calabaza.