De "mafia transgénero" a “propaganda china”: las polémicas en torno a la película 'Barbie'
Con 29 centímetros de altura y 226 gramos de peso, Barbie es quizá una de las muñecas más icónicas (y polémicas) del mundo. Y la película de Greta Gerwig que lleva su nombre, que se estrena el 21 de julio en Estados Unidos, no es la excepción.
La muñeca de Mattel (que coproduce la película) ha sido señalada de promover estándares imposibles de belleza e incluso ha sido calificada como un elogio al patriarcado, pero también es responsable de popularizar roles femeninos que eran, por decir lo menos, muy poco comunes al momento de su aparición en 1959: una mujer adulta, soltera, sin hijos, trabajadora y que vivía sola.
No es de extrañar que la polémica acompañe a una muñeca de la que se han vendido más de mil millones de copias en 150 países –según los datos de Mattel– y cuya película contó con un presupuesto de 145 millones de dólares, sumado a una intensa campaña que llegó a tal nivel que causó una escasez de pintura rosa, según confirmó la compañía Rosco a la cadena CNN en junio pasado.
La premisa de la película de Barbie, protagonizada por Margot Robbie y Ryan Gosling, parte de la idea de que la muñeca es expulsada de Barbieland por no tener un aspecto perfecto, y es entonces cuando parte hacia el mundo humano para encontrar un sentido más allá del que había entendido hasta entonces.
Pero las críticas a la película no tardaron en llegar, y el rango de críticos cubre desde el el ala más conservadora de la política de EEUU hasta gobiernos comunistas.
El gobierno comunista de Vietnam ya había anunciado que prohibiría el estreno de la película por un mapa que aparece durante unos segundos en el filme, que muestra una línea discontinua en el Mar de China Meridional, que es reclamado por Pekín.
El periódico oficialista vietnamita dijo que el mapa, que asemeja un dibujo de crayones hecho por un niño en edad preescolar, era una “imagen ofensiva”.
Para algunos, como el senador republicano por Texas Ted Crux, el hecho provocó una reacción contraria al considerar entonces que la película es “propaganda china” que “lavará el cerebro” a las niñas y niños que deseen ver la cinta.
El republicano es ya un veterano en peleas con personajes ficticios: en noviembre de 2021 criticó a Big Bird, por promover las vacunas durante la pandemia de covid-19, que causó más de un millón de muertes solo en Estados Unidos.
En la misma línea de Cruz, el congresista Mike Gallagher, de Wisconsin, escribió en su cuenta de Twitter que "el hecho de que un mapa de caricatura muestre reclamos ilegales ilustra la presión de Hollywood para complacer a los censores del Partido Comunista Chino".
La también senadora republicana Marsha Blackburn dijo que el mapa respalda los reclamos de Pekín sobre el mar de China Meridional y esto es "legal y moralmente erróneo, y debe tomarse en serio".
Warner Bros., el distribuidor de la cinta, dice que la imagen solo muestra el cambio de Barbie de su mundo de fantasía a un mapa que emula el real y que no tenía ningún tipo de mensaje político.
En una entrevista con The New York Times, Bill Hayton, experto en Vietnam y el Mar de China Meridional, afirmó que “no entendía por qué tanto alboroto”.
“El mapa de la película parece no tener relación con un mapa real del mundo”, añadió Hayton. “Esto parece que los censores de Vietnam intentan demostrar su patriotismo y su utilidad para el régimen”, dijo.
¿La película de Barbie niega la fe y la familia?
Ginger Gaetz, esposa del representante republicano por Florida, Matt Gaetz, fue otra de las que lanzó críticas a la película por supuestamente negar la fe y la familia.
La pareja acudió a la premiere en Washington D. C., y Ginger Gaetz escribió una encendida crítica en la que lamentó que el filme se hubiese alejado del "empoderamiento femenino" con el que ella creció, si no que " se niega a abordar cualquier noción de fe o familia, y trata de normalizar la idea de que los hombres y las mujeres no pueden colaborar positivamente”.
La crítica de la esposa de Gaetz alude a un elemento de la publicidad de la película de Barbie, en la que se refiere a Ken, de la muñeca, como "Él es solo Ken".
Las críticas republicanas sobre la inclusión de personajes LGBTQ en Barbie
La película cuenta en su reparto con la actriz Kate McKinnon, abiertamente lesbiana, y la actriz trans Hari Nef, como un guiño a la comunidad LGBTQ.
Charlie Kirk, presidente del grupo conservador Turning Point USA, incluso reflexionó sobre la idea de boicotear la película al calificarla de "propaganda trans", de lo que culpó a una supuesta "mafia transgénero", según dijo el pasado 30 de junio.
También sobre la controversia al incluir a un doctor transgénero se manifestó un seguidor de Twitter identificado como Just Mindy, quien criticó la presencia de Gaetz en una cinta que incluye a la actriz trans Hari Nef. "¿Me pregunto por qué no podemos ganar las 'guerras culturales'"?, escribió. Gaetz contestó a tono de broma: "Si dejas que un trans te impida ver a Margo [sic] Robbie, los terroristas ganan".
¿La película de Barbie promueve el capitalismo o es una sátira?
Las críticas, hasta ahora, están divididas. Algunas mencionan que la cinta de Gerwig aborda con éxito las críticas que han rodeado a Barbie por décadas, como su falta de diversidad y su representación, poco realista, del cuerpo femenino, al mostrar el absurdo del mundo de fantasía en el que habita la muñeca.
Ross Bonaire, crítico de Collider, observa que la película pudo haber sido “un poco más que un anuncio de juguetes”, pero asegura que ofrece “una mirada existencial hacia las dificultades de ser mujer, la terrorífica naturaleza de la vida y la certeza de que intentar ser perfecto es absurdo”.
Por su parte, David Fear, de Rolling Stone, califica a la película como “la cinta taquillera más subversiva del siglo XXI hasta la fecha”.
Pero otros, como Vulture y The New York Times señalan que la película se queda corta al criticar la multimillonaria industria detrás de la muñeca, cuya producción cuenta con la bendición de Mattel.
Alison Willmore, de Vulture, subraya que la película “no es una crítica al feminismo corporativo, sino una actualización” y que la cinta muestra una cierta “actitud defensiva” hacia las posibles críticas que podría enfrentar.
“Si bien Gerwig ofrece ciertos trazos de crítica, estos se sienten como meros guiños a los adultos en la audiencia que algo más”, escribe Manohla Dargis, de The New York Times.
¿Es Barbie feminista?
Mattel se ha esforzado para no calificar a la película de Barbie como una cinta “feminista”, pese a que su directora, Greta Gerwig, tiene en su filmografía cintas como Lady Bird y su versión de 2019 del clásico Mujercitas, que exploran los nuevos roles de la mujer.
Pero el debate es mucho más profundo que eso.
Carol Hay, profesora de filosofía feminista y autora del libro Think like a feminist, afirma en un texto publicado en The Conversation que la “feminidad hiperbólica y rubia de Barbie llegó a representar todo lo que estaba mal con los estándares de belleza de patriarcado”.
La profesora, no obstante, asegura que la cinta parece reinventar la imagen de la muñeca hacia un panorama más moderno e, incluso, aprecia algunas de sus características que en el momento de su lanzamiento eran revolucionarias (como el ser una muñeca soltera y con trabajo).
“Creo que Barbie ha funcionado durante mucho tiempo como un representante en el que se proyectan las aspiraciones culturales y las ansiedades sobre la feminidad”, escribe.
“El juguete salió al mercado por primera vez en 1959. Para las generaciones anteriores, fue la primera muñeca que animó a las niñas a aspirar a algo más que la maternidad, Barbie representaba la ambición sin complejos de la mujer profesional independiente”.
Pero para las mujeres que crecieron en los años ochenta y noventa, Barbie ha representado un estándar de belleza fabricado para complacer a los hombres heterosexuales.
La conclusión a la que llega la profesora de filosofía es que la película explora (e incluso satiriza) esos estándares y propicia un debate aún más interesante: ¿es la feminidad superficial por sí misma?. Cita a la autora Ruth Wippman: “ La moda y la belleza son consideradas vanidosas y superficiales, mientras que el béisbol y el fútbol son aplaudidos como una rama de la filosofía”.
El debate sobre si la película responde a estas incógnitas es muy amplio, pero Hay afirma: “Estoy llegando al reconocimiento de que las representaciones de la feminidad pueden existir para propósitos distintos que los de conquistar a un hombre”.