Maduro solicita auditoría electoral al Tribunal Supremo y el Centro Carter se lanza a criticarlo
La auditoría de las elecciones presidenciales que pidió Nicolás Maduro al Tribunal Supremo de Venezuela, lejos de ser recibida como una primera concesión a las denuncias de fraude, solo sirvió para desatar más críticas, ya que a nadie se le escapa que no se trata de una institución independiente.
"Doy la cara, me someto a la Justicia", afirmó Maduro fuera de la sede del Tribunal Supremo en la capital, Caracas, al anunciar la interposición de un recurso contencioso electoral. Agregó que había dicho a los jueces que está "dispuesto a ser convocado, interrogado (...) investigado por la Sala Electoral".
Pero el Centro Carter, que envió una delegación a Venezuela para monitorear las elecciones, criticó la acción afirmando que el alto tribunal no proporcionaría una revisión independiente.
“Hay otra institución gubernamental, designada por el gobierno, para verificar las cifras del gobierno para los resultados de las elecciones, que están en duda”, señaló Jennie K. Lincoln, quien encabezó la delegación. “Esta no es una evaluación independiente”.
El Centro Carter ya había dicho el martes que no podía verificar los resultados anunciados por el Consejo Nacional Electoral (CNE) dándole la victoria a Maduro y criticó lo que llamó una “completa falta de transparencia”.
La oposición por su parte publicó en un sitio web las actas a las que pudo tener , el 73% del total (por ley deberían haber sido todas) afirmando que el candidato Edmundo González, avalado por la inhabilitada María Corina Machado, ganó con un 70% de los votos.
"Está claro que Edmundo González Urrutia derrotó a Nicolás Maduro por millones de votos (...). El CNE de Maduro necesita tiempo para preparar resultados falsificados", dijo el jefe de la diplomacia estadounidense para el Hemisferio Occidental, Brian Nichols.
Maduro dice que el liderazgo opositor debería estar en la cárcel
Maduro volvió a insistir en que el CNE había sufrido un ataque informático y que ese hackeo le había impedido publicar las actas. “Los ingenieros están luchando ahora mismo” para resolver esos ataques, dijo sin dar más detalles.
“Deben estar tras las rejas", dijo de González y Machado, quien respondió a la amenaza con un llamado a la movilización.
"Le ofrecimos al régimen que aceptara democráticamente su derrota y avanzar en una negociación para asegurar una transición pacífica; sin embargo, han optado por la ruta de la represión, la violencia y la mentira", escribió Machado en X. "Ahora nos corresponde a TODOS hacer valer la verdad que TODOS conocemos. Vamos a movilizarnos. LO LOGRAREMOS", añadió sin precisar detalles.
Tras la proclamación de Maduro, las protestas estallaron el lunes en Caracas y otras ciudades, aunque se habían ido disipando.
Mientras Machado denunció una "escalada cruel y represiva" y asegura que la cifra de fallecidos en manifestaciones se eleva a 16, Maduro responsabilizó a González Urrutia y a ella por la violencia y dijo que "nunca jamás" llegarán al poder.
"Ustedes tienen las manos manchadas en sangre", dijo el mandatario. "Deben estar tras las rejas", agregó.
La Misión de la ONU denuncia la "reactivación de la maquinaria represiva"
La Misión Internacional Independiente de la ONU para Venezuela expresó el miércoles su preocupación por la violencia y abusos de derechos humanos en el marco de las protestas contra la reelección de Maduro.
" Estamos asistiendo a la reactivación acelerada de la maquinaria represiva que nunca fue desmantelada y ahora es utilizada para socavar las libertades públicas de los ciudadanos", señaló en un comunicado citado por EFE la jurista argentina Patricia Tappatá, miembro de la misión tripartita.
La misión presidida por la portuguesa Marta Valiñas dijo haber recibido denuncias de violencia desplegada en los últimos días por cuerpos de seguridad y grupos de civiles armados que apoyan al gobierno (conocidos como "colectivos") con al menos seis muertes, así como decenas de heridos.
También recordaron, citando informaciones del fiscal general, que al menos murió en el contexto de las protestas un miembro de las fuerzas armadas y hubo 46 heridos entre militares y policías.
La misión denunció que las informaciones apuntan al uso de armas de fuego contra personas que participaron en las manifestaciones, y recordaron que las operaciones de control del orden público "tienen que cumplir con los estándares y normas internacionales de derechos humanos, según los cuales el uso de la fuerza debe ser proporcionado y orientarse a la protección de la vida humana".
Las protestas en 17 de los 23 estados del país y en el distrito capital se saldaron con la detención de 749 personas, según el Ministerio Público, algunas de ellas privadas aún de libertad o enfrentando cargos graves como delitos de terrorismo, recordaron los tres expertos.
La misión en este sentido expresó su preocupación por el paradero del coordinador del partido opositor Voluntad Popular, Freddy Superlano, y de dos personas más que le acompañaban, tras ser detenidos por individuos encapuchados armados en la mañana del 30 de julio.
Información preliminar obtenida por la misión indica que sus captores serían del SEBIN, el servicio de inteligencia venezolano, indicaron los expertos.
La presión internacional para un recuento de votos aumenta
El Consejo Permanente de la OEA rechazó una resolución para exigir transparencia sobre el proceso electoral venezolano, al no alcanzar la mayoría requerida.
La cancillería de la vecina Colombia, país que se abstuvo en la sesión de la OEA, anunció en un comunicado "os permanentes con los gobiernos de Brasil y México para crear las condiciones necesarias" en busca de "un acuerdo de convivencia" en Venezuela.
Brasil también prefirió abstenerse y México rechazó participar. El documento subraya además que "se han sostenido conversaciones constantes" con el gobierno de Maduro y sectores opositores.
La presidencia de Brasil se negó a comentar el miércoles si daría por buena una auditoría del Tribunal Supremo de Justicia como verificación independiente. En cambio, remitió al comunicado del lunes de su cancillería pidiendo “la publicación por parte del CNE de los datos desglosados por colegios electorales, un paso indispensable para la transparencia, credibilidad y legitimidad del resultado electoral”.
El presidente Luiz Inácio Lula da Silva dijo el martes sobre Maduro que “cuanta más transparencia haya, mayores serán sus posibilidades de tener paz para gobernar Venezuela”.
El presidente colombiano, Gustavo Petro, uno de los aliados regionales de Maduro, pidió en X un "escrutinio transparente" con "veeduría de todas las fuerzas políticas" y "veeduría internacional".
"El presidente Petro (es) un hombre honorable, serio, lo escucho mucho, estoy en diálogo con él", respondió Maduro.
Por su parte, el secretario de la OEA, Luis Almagro, adelantó este miércoles que va a presentar cargos ante la Corte Penal Internacional de "imputación y orden de captura" contra Maduro por el "baño de sangre" en Venezuela.
"Maduro prometió un baño de sangre (...) y lo está haciendo", escribió Almagro en X.
Horas antes, el jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell, había declarado que "las amenazas" contra Machado y González Urrutia "son inaceptables".
"Nuestra paciencia, y la de la comunidad internacional, se está agotando a la espera de que las autoridades electorales venezolanas digan la verdad", había dicho el portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, John Kirby, antes de las declaraciones de Nichols.
"Entonces yo puedo decir 'perdí la paciencia con ustedes'", replicó Maduro.
Con información de AP, EFE y AFP.
Mira también: