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Las imágenes de una mortal persecución por parte de dos policías a un hombre sin piernas que intentaba huir apoyándose sobre los muñones de sus extremidades inferiores continúan avivando la polémica sobre la brutalidad policial en el país, en especial contra hombres negros.
Anthony Lowe, de 36 años, murió el pasado jueves por disparos de agentes de la Policía de Huntington Park, una ciudad del condado de Los Ángeles.
La muerte de Lowe, quien se movilizaba en silla de ruedas, desató protestas y denuncias por parte de su familia y líderes de la comunidad, pero tras difundirse en redes un video grabado con un teléfono móvil en el que se capta parte del incidente, la reacción no se ha hecho esperar pocos días después de que las imágenes de la brutal y mortal paliza a otro hombre negro de Memphis desataran protestas y una investigación que ya ha sancionado a varios policías e incluso paramédicos.
En una conferencia de prensa llevada a cabo el lunes, personas cercanas a Lowe y defensores de la comunidad exigieron que los policías implicados en su muerte sean despedidos y juzgados por asesinato.
“Anthony fue brutalmente ejecutado por agentes de Policía de Huntington Park el jueves pasado en un ataque que fue cruel y cobarde”, dijo a la prensa Cliff Smith, un organizador de la Coalición para el Control Comunitario de la Policía.
“Estoy desconsolada y llena de rabia”, declaró al diario The Guardian la hermana menor de Lowe, Tatiana Jackson. “Simplemente no puedo entender por qué le harían eso a alguien en silla de ruedas. Quiero que alguien me explique cuál fue la razón por la que alguien le dispara a alguien que no tiene piernas”.
Anthony Lowe era padre de dos adolescentes. La madre del hijo varón de Lowe, Ebonique Simon, lo describió a CNN como un "padre cariñoso y afectuoso".
El video se publicó el sábado en las redes. La policía no lo ha verificado públicamente, pero la hermana de Lowe lo identificó en las imágenes.
En el video no se ve el momento exacto en el que los policías matan al afroestadounidense, pero sí se aprecia una persecución en la que el hombre intentaba huir, corriendo sobre los muñones de sus extremidades inferiores y cayéndose en ocasiones.
Al inicio del video, de 23 segundos de duración, el hombre aparece en el suelo, junto a una silla de ruedas, como si acabara de bajarse o caerse de ella. Intenta arrastrarla consigo pero opta por alejarse corriendo de los policías, con un gran cuchillo en la mano. De fondo se oyen sirenas y se ven más patrullas llegando al lugar.
En algún momento se ve que el hombre hace un gesto amenazante con el cuchillo en el aire, como si diera una cuchillada o amenazara con lanzar el arma blanca, pero se da la vuelta y sigue alejándose, de espaldas a los policías.
Un portavoz del departamento del sheriff del condado de Los Ángeles dijo al diario L.A Times que el hombre "no arrojó el cuchillo en última instancia, sino que hizo el movimiento varias veces sobre su cabeza como si fuera a lanzar el cuchillo”, lo cual contradice la versión inicial de las autoridades, que aseguraban que el sospechosos intentó arrojar el arma blanca.
De acuerdo con el portavoz, los dos agentes dispararon aproximadamente 10 rondas a Lowe, quien recibió un disparo en el torso y fue declarado muerto en la escena.
En Huntington Park los agentes no llevan cámaras corporales, por lo que, según la propia policía, se están investigando las imágenes captadas desde un negocio cercano, pero no pretenden hacerlas públicas.
El pasado 30 de enero, el Departamento de Policía de Hungtingon Park emitió una declaración en la que aseguran que sus dos oficiales estaban respondiendo a un apuñalamiento en la tarde del 26 de enero.
La víctima, que fue reportada en estado crítico por la herida que sufrió, describió a su agresor como un hombre en silla de ruedas, a quien identificaron como Anthony Lowe y lo localizaron por la calle, a unas pocas cuadras de distancia de donde había ocurrido el apuñalamiento. Lowe llevaba un cuchillo.
De acuerdo con la policía, sus agentes intentaron detener al hombre en su silla de ruedas pero este ignoró las órdenes y “amenazó con avanzar o arrojar el cuchillo a los oficiales”. Según el comunicado, aplicaron dos descargas eléctricas al sospechoso, pero no fueron efectivas. Le dispararon unas 10 veces, dijo la propia fuente policial.