De territorio a estrella: ¿Podría EEUU agregar la estrella de Puerto Rico a su bandera?
En las elecciones generales del 5 de noviembre, la mayoría de los votantes de Puerto Rico volvieron a inclinarse a favor de la estadidad, de transformarse en el estado número 51 de Estados Unidos.
El tema del estatus del estado libre asociado de Puerto Rico es complejo y siempre está vigente porque, como dicen los expertos, toca absolutamente todos los aspectos de la vida de los boricuas: desde la salud hasta la emigración hacia los estados; desde la respuesta federal a un desastre natural hasta los beneficios sociales.
A pesar de ser un territorio estadounidense, Puerto Rico tiene 'voz' pero no tiene voto en las decisiones que se toman en Washington DC. En este contexto, la reciente victoria de Jenniffer González, figura prominente proestadidad, ha reavivado el debate sobre el futuro de la isla y su posible integración como el estado. En segundo lugar quedó Juan Dalmau, quien se postuló para el Partido Independentista de Puerto Rico y se convirtió en el primer candidato fuera de los dos principales partidos de la isla en terminar en segundo lugar en las elecciones generales.
Para profundizar en este tema, Univision Noticia entrevistó a George Laws García, experto en política pública y director ejecutivo del Puerto Rico Statehood Council (PRSC, por sus siglas en inglés) organización que promueve la estadidad. ¿Podría Puerto Rico convertirse en estado pleno de EEUU? ¿Por qué no ha sucedido hasta ahora?
— Univision: Puede explicar el trasfondo del tema de la estadidad en Puerto Rico, tomando en cuenta las sucesivas votaciones en las que la mayoría de los puertorriqueños se ha manifestado a favor de la estadidad y la reciente victoria de la candidata proestadidad.
— George Laws García: El anhelo de estadidad en Puerto Rico no es un fenómeno reciente. Desde el 2012, se han realizado cuatro votaciones la isla, donde se ha consultado a los votantes sobre las opciones para resolver el problema del estatus territorial. Este problema es central en la discusión política puertorriqueña y tiene dos partes principales.
La primera es el 'déficit democrático'. El estatus actual de Puerto Rico como territorio no incorporado de Estados Unidos implica que el Congreso estadounidense tiene la facultad de legislar sobre la isla sin que sus habitantes cuenten con una representación plena en ese cuerpo legislativo. Los puertorriqueños carecen de voto en la Cámara de Representantes. Solamente tenemos un comisionado residente, que sí puede presentar proyectos, puede hablar en comité pero no puede votar en el pleno. Y la población de Puerto Rico tampoco tiene representación en el Senado.
A nivel presidencial, tampoco los puertorriqueños participan en el Colegio Electoral, lo que significa que no pueden votar por el presidente.
Así que en Puerto Rico, aunque las leyes federales aplican todos los días e impactan todos los ámbitos, no tenemos la capacidad de tener representación directa bajo el estatus territorial actual. Y el presidente de EEUU puede tomar decisiones que impactan desde la respuesta a un huracán hasta el envío de fuerzas armadas de Puerto Rico a la guerra, pero la gente de la isla no puede votar por el presidente.
El otro gran tema es la desigualdad. El Tribunal Supremo, a través de unas decisiones por los últimos digamos 100 años, ha determinado que el Congreso tiene la potestad de tratar a Puerto Rico de forma desigual bajo las leyes federales. Esto se traduce en un menor apoyo en áreas cruciales como la salud, la asistencia nutricional, la infraestructura y las oportunidades educativas y económicas, creando una disparidad tangible entre la calidad de vida de los ciudadanos de la isla y la de los ciudadanos de los estados.
El impacto acumulado de estas deficiencias ha provocado una emigración masiva de puertorriqueños hacia los estados, donde se estima que residen alrededor de 6 millones de personas de origen puertorriqueño. Porque lo que hemos visto en las últimas dos décadas desde el censo del 2000, donde la población de Puerto Rico llegó a su pico de 3.9 millones, es que hemos ido bajando la cantidad de población y de una forma estrepitosa.
Por eso, resolver el estatus territorial no es una mera cuestión política, no es algo teórico; es una cuestión existencial para la isla, que ha visto su población disminuir drásticamente en las últimas dos décadas.
— Univision: ¿Podría profundizar en el impacto directo que la no estadidad tiene en la economía y en la vida diaria de los ciudadanos de Puerto Rico?
— George Laws García: El impacto de la no estadidad se manifiesta de diversas maneras en la vida cotidiana de los puertorriqueños. Un ejemplo claro y contundente se encuentra en el ámbito de la salud. Los programas federales de Medicare y Medicaid, que brindan cobertura médica a personas mayores y de bajos recursos, respectivamente, reciben una asignación de fondos significativamente menor en Puerto Rico en comparación con los estados. Esta disparidad en la financiación tiene graves consecuencias para el sistema de la isla.
Los hospitales cuentan con menos recursos. La falta de fondos federales adecuados limita la capacidad de los hospitales en Puerto Rico para brindar más atención médica de calidad. Muchos hospitales se encuentran en una situación financiera precaria, lo que representa un riesgo para la salud pública.
También impacta en la escasez de médicos. Los bajos reembolsos que reciben los médicos en Puerto Rico, los especialistas, ha provocado una fuga de profesionales de la salud hacia EEUU, donde la demanda de médicos bilingües ha aumentado considerablemente. Esto se traduce en largos tiempos de espera para obtener citas médicas y una menor disponibilidad de especialistas. Y no solo emigran los doctores, sino enfermeras, técnicos, personas que operan en sistemas de ambulancia, etcétera... esos profesionales han encontrado que en los estados reciben hasta un 80% más ingreso que en Puerto Rico.
Y la falta de a servicios de salud de calidad tiene un impacto devastador en el bienestar social y emocional de los puertorriqueños. La incertidumbre y la dificultad para recibir atención médica adecuada generan para muchos, estrés psicológico y, en casos extremos de salud, determinados tipos de cáncer, incluso, pueden incluso costar vidas.
— Univision: Claro, ese mismo trato desigual también puede verse ante desastres naturales, ¿no? ¿Se puede decir que la asistencia que brinda FEMA (Agencia Federal para el Manejo de Emergencias) y otras agencias ante desastres naturales como el huracán María tiene menor despliegue?
— George Laws García: Definitivamente sí, existen diferencias significativas en la respuesta de FEMA a los desastres naturales en Puerto Rico en comparación con los estados. Estudios realizados después de los huracanes Irma y María, que devastaron la isla en el 2017, demostraron que la respuesta federal en Puerto Rico fue más lenta y los beneficios otorgados fueron menores que en Florida y Texas, que también fueron afectados por huracanes en el mismo período. Además, la atención del Ejecutivo Federal, en términos de recursos y apoyo directo, fue menos robusta en Puerto Rico.
— Univision: Mitch McConnell, el líder republicano saliente del Senado, declaró recientemente que la inclusión de un nuevo estado no formaba parte de la agenda política. ¿Cómo recibió el movimiento proestadidad en Puerto Rico esta declaración?
— George Laws García: La declaración de Mitch McConnell no fue recibida con sorpresa. El senador ha expresado su oposición a la isión de nuevos estados durante años, especialmente a la isión de Washington DC como estado, la capital del país que es sólidamente demócrata. Sin embargo, la opinión de McConnell ya no tiene el mismo peso que antes debido a los cambios en el liderazgo. La elección del senador John Thune (para el Congreso que se renueva en 2025) como nuevo líder republicano abre un nuevo capítulo en el debate sobre la estadidad para Puerto Rico.
— Univision: ¿Consideran que en esta nueva etapa, con un nuevo liderazgo en el Senado, existe una posibilidad más concreta de avanzar con la estadidad?
— George Laws García: La elección de Jenniffer González Colón, nuestra comisionada residente, una republicana con amplia experiencia en el Congreso de Estados Unidos, como gobernadora de Puerto Rico abre un abanico de oportunidades para el movimiento proestadidad. Su experiencia de ocho años en la Cámara de Representantes y sus sólidas relaciones con del Congreso, especialmente con los republicanos, le brindan una posición privilegiada para impulsar la agenda.
El hecho de que ella va a tomar las riendas del Gobierno de Puerto Rico a partir de enero abre oportunidades que simplemente no hemos tenido antes. El último gobernador republicano electo de Puerto Rico fue Luis Fortuño, y durante el tiempo en que él fue gobernador, vimos mayores niveles de apoyo de los republicanos a la posibilidad de resolver el estatus territorial y apoyaban la posibilidad de Puerto Rico se convierte en estado.
Sin embargo, obviamente reconocemos que hay un sinnúmero de otros temas prioritarios en la agenda política republicana y que será necesario un esfuerzo concertado para asegurar que la estadidad para Puerto Rico se convierta en un tema en el Congreso.
— Univision: Históricamente, el Partido Republicano ha mostrado una postura más cautelosa frente al tema de Puerto Rico. ¿Considera que esto está cambiando?
— George Laws García: Si bien es cierto que históricamente el Partido Republicano ha sido más cautelosos con respecto a la estadidad para Puerto Rico, hemos tenido un sinnúmero de diferentes legisladores del lado republicano que también ha apoyado a este tema. Pero situación actual presenta una serie de factores que podrían probablemente propiciar que se enfoque diferente.
En Puerto Rico tenemos un momento que que es una oportunidad histórica porque la isla está ahora en neta recuperación después de los huracanes irma y María. Tenemos una infraestructura que ha mejorado muchísimo y va a continuar mejorando cuando veamos los fondos federales que se han designado por el Congreso para la recuperación económica después del huracán y también con la legislación federal para la reconstrucción.
Segundo, Puerto Rico está reestructurado su situación de deuda, que fue una crisis fiscal que en el 2016 llevó a la quiebra a la isla y el Congreso tuvo que intervenir. Ya se ha reestructurado más de 80% de los bonos estatales. Así que la preocupación que muchos de los republicanos en el Congreso tenían con respecto a Puerto Rico, que obviamente en ese momento tenía que ver con la insolvencia fiscal, mucho de eso se ha atendido y ha habido unas reformas económicas y fiscales que han mejorado muchísimo la transparencia sobre la situación fiscal.
Y ahora, además, tenemos una gobernadora electa que ha llegado con una agenda claramente enfocada en incrementar la participación ciudadana en la fuerza laboral, incrementar el desarrollo. Eso va a crear las condiciones para que haya una oportunidad de revisar la mirada sobre Puerto Rico, que no se vea a la isla como un sitio del que simplemente están viniendo a pedir dinero federal para atender crisis, sino como algo que añade valor a la economía nacional y que también puede servir como un puente estratégico de Estados Unidos para mejorar sus relaciones económicas con el resto de América Latina.
La posición geográfica de Puerto Rico en el Caribe y su fuerte identidad latina la convierten en un nexo estratégico, en un contexto geopolítico donde China busca expandir su influencia en la región, la estadidad para Puerto Rico podría fortalecer la posición de los Estados Unidos en el hemisferio.
En cuanto al Partido Demócrata, ellos han liderado los esfuerzos legislativos para avanzar hacia la estadidad en los últimos años. Sin embargo, la forma en que los republicanos aborden este tema y los vehículos legislativos que se utilicen para impulsarlo podrían ser diferentes a los que han impulsado los demócratas.
— Univision: ¿Puede ampliar el tema de la emigración de puertorriqueños de la isla hacia EEUU y la relación al tema del estatus?
— George Laws García: La emigración de puertorriqueños a los estados es una consecuencia directa de las limitaciones impuestas por el estatus territorial actual. Si este estatus se mantiene, las proyecciones demográficas indican que la población de Puerto Rico continuará disminuyendo, debilitando aún más la economía de la isla. La pérdida de fuerza laboral, la reducción de la base contributiva y la disminución del consumo interno son factores que impiden el crecimiento económico y perpetúan un estancamiento.
La estadidad para Puerto Rico no solo beneficiaría a la isla, sino que también tendría un impacto positivo en la comunidad latina en los Estados Unidos y en las relaciones del país con América Latina. La representación de Puerto Rico en el Congreso, con dos senadores y cuatro representantes, fortalecería la voz de la comunidad latina en la toma de decisiones a nivel nacional. Además, la incorporación de Puerto Rico como estado contribuiría a que los Estados Unidos se perciban como una nación más diversa e inclusiva, reflejando la realidad de su composición demográfica.
Puerto Rico, como estado, podría convertirse en un puente en el Caribe y en América Latina, fortaleciendo los lazos económicos y culturales con la región y representaría una oportunidad para los Estados Unidos para consolidar su posición como líder en el hemisferio occidental.
— Univision: ¿Considera que este escenario aumenta las posibilidades de que se celebre un referéndum vinculante sobre la estadidad en los próximos años?
— George Laws García: Para que se celebre un referéndum vinculante sobre la estadidad en Puerto Rico, el Congreso de Estados Unidos debe aprobar una ley que lo autorice. En los últimos cuatro años, se ha desarrollado un proyecto de ley llamado Puerto Rico Status Act que propone la celebración de un referéndum vinculante en el que se presenten tres opciones no territoriales: la independencia, la libre asociación y la estadidad. Si bien este proyecto de ley no llegó a ser aprobado, sentó un precedente importante y podría servir como punto de partida para futuras iniciativas legislativas.
Es crucial que se promueva una discusión amplia sobre la importancia de atender el estatus político de Puerto Rico. El actual estatus territorial no solo limita el desarrollo económico de la isla, sino que también perjudica a Estados Unidos.
Esta entrevista ha sido editada para una mejor comprensión de los lectores.
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