La inflación se sitúa en 2.8% en febrero, número mejor que el esperado (aunque todavía no refleja el impacto de los aranceles)
El índice de precios al consumidor (IPC), el indicador clave de inflación en EEUU, aumentó en febrero un 0.2%, informó este miércoles la Oficina de Estadísticas del Departamento de Trabajo. En términos anuales, el índice de inflación registró un incremento del 2.8%, ligeramente por debajo del 3% en enero, un número mejor que el esperado, que aún no refleja el impacto de los aranceles.
El alza en los precios de vivienda (que subió un 0.3%) en febrero, fue uno de los mayores impulsores del incremento. Excluyendo alimentos y energía, el índice general subió un 0.2% en febrero, tras un incremento del 0.4% en enero. El enfriamiento de los precios vino impulsado por los combustibles.
En términos mensuales, la inflación también fue menor de lo esperado. Los precios al consumidor subieron un 0.2% en febrero con respecto al mes anterior, frente al fuerte aumento del 0.5% registrado en enero.
La inflación se desaceleró en febrero, por primera vez desde septiembre, y el indicador de inflación cayó a su nivel más bajo en cuatro años, a pesar de que los aranceles adicionales al acero y al aluminio, que entraron en vigor el miércoles, amenazan con disparar los precios.
El dato de inflación llega en medio de la guerra comercial desatada por los aranceles del presidente Donald Trump en algunos bienes, como el acero y el aluminio, y los que amenaza con imponer a otros.
Se espera que los aranceles a las importaciones afecten a los precios al consumidor en los próximos meses. El reporte de inflación de febrero aún no refleja el impacto de las tarifas a las importaciones.
En septiembre de 2024, la inflación había caído a un mínimo de 3 años y medio, situándose en 2.4%. La mejora en los datos de inflación se estancó tras una fuerte caída desde su pico del 9.1% en junio de 2022, en una economía global afectada por la pandemia.
¿Puede haber un problema de inflación para Trump?
Si los aumentos de precios siguen siendo elevados, esto podría convertirse en un problema no solo económico, sino político para Trump, quien como candidato prometió “aplastar la inflación” desde el primer día y los republicanos hicieron campaña culpando al entonces presidente Joe Biden por los altos precios.
Y con Trump imponiendo —o amenazando con hacerlo— una amplia gama de aranceles a Canadá, México, China, Europa e India, la mayoría de los economistas pronostican que el crecimiento de los precios probablemente se mantendrá elevado este año.
El objetivo de inflación para la Reserva Federal (Fed) es del 2%, pero algunos expertos ahora señalan que parece no haber avances hacia esa meta.
“No hay un verdadero progreso hacia ese objetivo del 2%”, dijo a la agencia AP Dan North, economista senior de Allianz Trade Americas, una firma de servicios financieros. “Sospecho que pronto empezaremos a ver los números de inflación moverse en la dirección opuesta”.
La inflación, la Fed y sus tasas
Las cifras de este miércoles sirven a la Fed para tomar decisiones sobre si reducir su tasa de interés clave, la cual tiene implicancias en las tasas crediticias.
Durante el 2024, la Fed redujo tres veces esa tasa, en medio de señales de que la inflación estaba disminuyendo. En enero, el presidente de la Fed, Jerome Powell, dijo que las reducciones estaban en pausa y que es muy poco probable que haya un recorte en puerta.
El mayor factor de incertidumbre para la Fed —y para toda la economía— son los aranceles y el errático uso que de ellos hace Trump como arma diplomática. Desde su toma de posesión en enero, Trump ha aprobado aranceles del 20% a todas las importaciones de China y del 25% a Canadá y México, aunque la mayoría de estos aranceles han sido suspendidos por un mes.
Este miércoles, entraron en vigor aranceles del 25% a las importaciones de acero y aluminio, lo que podría encarecer productos como automóviles, electrodomésticos y electrónicos. Además, Trump ha dicho que impondrá en abril aranceles recíprocos a los países que gravan las exportaciones de EEUU, incluyendo países europeos, India y Corea del Sur.
Estos aranceles han sacudido los mercados financieros y podrían frenar drásticamente la economía, con algunos analistas aumentando las probabilidades de una recesión.
Economistas del Yale Budget Lab calculan que los aranceles recíprocos, por sí solos, podrían elevar la tasa promedio en EEUU a su nivel más alto desde 1937 y costarle a cada hogar estadounidense hasta $3,400.
Aparte de los aranceles, algunos productos, como los huevos, siguen impulsando la inflación al alza. La gripe aviar ha obligado a sacrificar más de 160 millones de aves, incluyendo 30 millones solo en enero, en un intento por contener el brote. El precio promedio de los huevos alcanzó los $4.95 por docena a nivel nacional en febrero, un récord histórico. Durante décadas, el precio había estado por debajo de los $2 por docena antes del brote.
Los economistas también prestarán especial atención a los precios de autos nuevos y usados, seguros de automóviles, boletos de avión y alquileres, entre otros elementos, para obtener una visión más clara sobre la dirección que tomará la inflación.