Acusan al sospechoso asesino de Gilgo Beach de matar a dos personas más
Rex Heuermann, arquitecto de la Ciudad de Nueva York y presunto asesino serial, fue acusado este jueves de haber matado a dos personas más. El hombre fue arrestado en 2023, en relación con una serie de cadáveres hallados en Gilgo Beach, Long Island.
Ya estaba acusado del asesinato de al menos cuatro mujeres en el área de Gilgo Beach, identificadas como Melissa Barthelemy, de 24 años; Megan Waterman, de 22 años y Amber Lynn Costello, de 27 años.
En enero se sumó la acusación por la muerte de Maureen Brainard – Barnes.
Desde la corte de Riverhead, en Long Island, nuestro reportero Joaquín Torres, de Univision 41, informó que Heuermann fue acusado este jueves de asesinar a una mujer identificada como Jessica Taylor, cuyas partes de su cuerpo fueron encontrados en distintos lugares y años.
Primero en 2003, cuando apareció su torso en el bosque de Manorville, y luego en 2011, las manos y antebrazos fueron hallados a lo largo de Ocean Parkway.
Asimismo, el hombre es señalado de matar a otra mujer en 1993. Se trata de Sandra Costilla.
Aún se sospecha de un séptimo asesinato, pero las autoridades no ha presentado cargos por esa muerte.
Según el abogado de Rex Heuermann, el llamado "asesino serial de Gilgo Beach" se declaró inocente de los nuevos cargos.
Catean nuevamente la casa del presunto asesino serial de Gilgo Beach
Hace poco más de dos semanas, autoridades realizaron un nuevo cateo y recolectaron más evidencia en la casa del arquitecto, en Massapequa Park.
Oficiales de la policía estatal y del condado llegaron a la casa en Long Island antes de las 7:00 am. Utilizaron sus vehículos y colocaron barreras para acordonar la cuadra y levantaron tiendas de campaña blancas frente a la casa del presunto asesino serial.
Los oficiales retiraron cajas y bolsas de evidencia de la casa, mientras unidades de laboratorio forense y criminalístico pasaron largas horasen el lugar.
También visitaron la casa funcionarios de la oficina del médico forense del condado de Suffolk.
“Como declaró anteriormente el fiscal de distrito Tierney, el trabajo del grupo de trabajo sobre homicidios de Gilgo Beach continúa”, dijo su portavoz Tania López en un comunicado enviado por correo electrónico a AP.
En julio pasado, la policía pasó casi dos semanas registrando la casa, ubicada en un pueblo suburbano a unas 40 millas (64 kilómetros) al este de Manhattan.
Encontraron más de 200 armas de fuego, incluidas docenas almacenadas en una bóveda del sótano. Los investigadores también rompieron una plataforma de madera, utilizaron una excavadora para excavar el patio trasero y escanearon en busca de objetos enterrados con equipo especializado.
Heuerman era el dueño de una empresa consultora de arquitectura fundada en 1994 y ubicada actualmente en Midtown, Manhattan.
El arquitecto, quien se ha declarado no culpable de todos los homicidios, ha estado detenido desde su arresto en julio pasado y ha mantenido su inocencia.
Se espera que Heuermann, de 60 años, regrese al tribunal de Riverhead el 18 de junio para una audiencia sobre el estatus. No se ha fijado ninguna fecha para el juicio.
"Mi querida hija, nunca serás olvidada"
La madre de Jessica Taylor, Elizabeth Baczkiel, estuvo en el tribunal para la audiencia del jueves. Mostró fotografías de la infancia de su hija, pero no habló con los periodistas. Su abogada, Gloria Allred, leyó un comunicado de Baczkiel en el que describió a su hija como “cariñosa, compasiva y muy divertida” y dijo que habría sido una gran madre.
"Mi querida hija, nunca serás olvidada", decía el comunicado, según AP. "Estarás por siempre en nuestros corazones."
Por su parte, Valerie Mack, de 24 años, que trabajaba como acompañante en Filadelfia, desapareció en 2000 y fue vista por última vez por su familia en Port Republic, Nueva Jersey, cerca de Atlantic City. Algunos de sus restos esqueléticos fueron descubiertos ese año en los bosques de Manorville.
Se encontraron más restos de ella en 2011 durante la búsqueda en Gilgo Beach.
Inicialmente, conocidos como "Jane Doe No. 6", los restos de Mack no fueron identificados hasta 2020, cuando las pruebas genéticas revelaron su identidad.
Sandra Costilla tenía 28 años cuando fue asesinada y vivía en la Ciudad de Nueva York.
Hace una década, los fiscales del condado de Suffolk dijeron públicamente que creían que Costilla había sido asesinada por John Bittrolff, un carpintero de la zona que fue condenado por asesinar a otras dos mujeres, cuyos cuerpos fueron encontrados en la misma parte de Long Island.
Pero Bittrolff nunca fue acusado de la muerte de Costilla por falta de pruebas e insistió en que no mató a nadie.
"Después de la confirmación de hoy de que John Bittrolff no tuvo nada que ver con la muerte de Sandra Costilla, espero sinceramente que el Grupo de Trabajo de Gilgo Beach lleve a cabo una investigación real y significativa sobre los asesinatos de Rita Tangredi y Colleen McNamee para encontrar a su verdadero asesino", dijo el jueves su abogado Jon Manley, refiriéndose a las dos mujeres por las que Bittrolff fue condenado por matar.
El abogado de Heuermann, Brown, dijo que planeaba solicitar los archivos de la fiscalía sobre Bittrolff. “Francamente, el departamento de policía y la oficina del fiscal de distrito señalaron a Bittrolff por ese asesinato”, dijo.
Con información de AP
