La curiosa historia del jarabe de chocolate en la medicina
El jarabe de chocolate es infaltable para darle un toque extra a helados o pasteles, pero este delicioso alimento no solo es un placer para el paladar sino que también tiene un uso médico que muchos desconocen.
Los medicamentos no siempre tienen el mejor sabor, por eso a fines del siglo XIX médicos y farmacéuticos encontraron en el jarabe de chocolate el mejor aliado para asegurar que las personas consumieran sus medicinas.
Jarabe de chocolate: Un aliado de la medicina
Los medicamentos ayudan a superar enfermedades que en caso contrario podrían resultar mortales pero su sabor puede ser desagradable, lo que hace que muchas personas no los tomen como deben arriesgando su salud.
En 1896 productores de chocolate en polvo publicaron avisos en que el prestigioso The Druggists Circular and Chemical Gazette, un manual para quienes se dedicaban a la elaboración de medicamentos para el consumo masivo.
Los farmacéuticos habían encontraron en la cocoa en polvo como la sustancia ideal para crear un jarabe lo suficientemente dulce para enmascarar el sabor de cualquier medicina sin alterar sus propiedades terapéuticas.
La publicidad describía a la cocoa en polvo de Hershey como perfectamente soluble y pura para darle sabor a casi cualquier líquido, incluyendo por supuesto las medicinas haciéndolas así mucho más atractivas.
Un artículo de 1899 publicado en The Pharmaceutical Era, habla del chocolate como la única sustancia capaz de enmascarar el sabor amargo de los medicamentos además de ayudar a evitar las náuseas que estos le provocaban a mucha gente.
En tiempos donde las medicinas venían principalmente en forma líquida debido a lo complicado que era crear la medida perfecta de compuestos en una píldora, el jarabe de chocolate fue el aliado ideal para conseguir que los pacientes siguieran con el tratamiento.
Hoy los medicamentos ya no saben tan mal, pero igualmente puede ser difícil hacer que los niños los acepten, los expertos siguen recomendando el jarabe de chocolate como una forma de hacerlos atractivos para el paladar infantil.
Jessica C. Stovel química farmacéutica especializada en niños y adolescentes resalta que el jarabe de chocolate no solo enmascara sabores sino que además no interfiere en la acción terapéutica de los medicamentos, por supuesto que antes de utilizarlo es necesario consultar con el médico a cargo del tratamiento.
Un uso impensado del jarabe de chocolate con una larga historia ayudando a hacer más agradables los medicamentos siendo el mejor aliado para que los quisquillosos completen sus tratamientos.
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