La reina Isabel II se atrevió a llorar en público: su amor por Felipe rompió el protocolo
El funeral del príncipe Felipe es uno de los acontecimientos más recientes que han marcado a la Corona británica (si te interesa saber más sobre los sucesos más importantes de la familia real, hay una serie gratis en VIX cine y tv).
En su despedida, muchos detalles llamaron la atención tanto de los fans de los royals como de la prensa. Sin duda, el regreso de Harry al Reino Unido, así como su interacción con William y el resto de su familia fue uno de ellos, pero las joyas que usó Kate Middleton tampoco pasaron desapercibidas.
Pero hubo algo que superó todos esos detalles. La atención estuvo centrada en la reina Isabel II, quien compartió 73 años de su vida a lado de Felipe de Edimburgo.
Debido a las restricciones por el coronavirus, el funeral fue un tanto atípico. Solo pudieron asistir 30 personas y la monarca estuvo completamente aislada del resto de la familia. Además de llegar por separado, en la ceremonia religiosa se sentó sola.
La imagen de ese último adiós fue desgarradora; pero, incluso en ese momento, la reina sacó a relucir el temple tan fuerte que siempre la ha caracterizado: casi no se veía la tristeza en su rostro.
Lo que pocas personas notaron fue que, momentos antes de entrar a la capilla, la monarca mostró su lado más sensible y que en pocas ocasiones deja ver.
Cuando iba en el auto derramó unas lágrimas por su fallecido esposo, demostrando que su amor era verdadero y mucho más fuerte de lo que cualquiera se puede imaginar.
Esta es una de las pocas ocasiones en las que la reina ha llorado en público (de hecho, muchos tienen la idea de que no lo hace), lo que deja en claro el dolor por el que atraviesa en estos momentos.
Debido al protocolo real, Isabel II no debe mostrar sus emociones frente a espectadores, ya que puede ser interpretado en algunos casos como su apoyo a ciertas decisiones políticas o a algunos personajes.
Uno de sus biógrafos señaló que desde la adolescencia fue entrenada para tener un semblante neutro en sus eventos y obligaciones públicas.
¿No te parece muy conmovedor el gesto de la reina para despedirse de su esposo?
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