Por qué Canadá decidió recortar drásticamente la isión de nuevos inmigrantes
El gobierno de Canadá anunció este jueves que reducirá significativamente el número de nuevos inmigrantes luego de que no logró el “balance” adecuado al incrementar las autorizaciones de residencia permanente tras la pandemia.
En una conferencia de prensa, el primer ministro Justin Trudeau anunció el recorte en el número de nuevos residentes permanentes que permitirá en el país.
Tras la pandemia de covid-19, Canadá aumentó drásticamente el número de estos por año.
Ahora, el gobierno redujo la cifra que tenía programada de residencias permanentes de 500,000 para 2025 a 395,000 y continuará reduciendo la cantidad de autorizaciones en 2026 a 380,000 y en 2027 a 365,000.
Para el 2024, el gobierno había fijado una meta de 485,000 nuevos residentes permanentes.
De acuerdo con la agencia de estadística gubernamental Statistics Canada, hasta el segundo trimestre de 2024 había 2.8 millones de residentes temporales autorizados para estudiar o trabajar en el país.
“En los tumultuosos tiempos, mientras salíamos de la pandemia, no logramos un buen equilibrio entre abordar las necesidades de trabajo y mantener el crecimiento de la población”, dijo Trudeau en su conferencia de este jueves.
La inmigración se debe “controlar” y ser “sostenible”, dice Trudeau
En su mensaje, Trudeau dijo que la reducción pondrá una “pausa en el crecimiento poblacional”, mientras los gobiernos locales fortalecen sus programas de vivienda y de salud.
“La inmigración es esencial para el futuro de Canadá, pero se debe controlar y debe ser sostenible”.
El gobierno liberal de Trudeau había sido criticado por haber elevado el número de nuevos residentes permanentes tras la pandemia, en medio de un crecimiento en las cifras de desempleo, principalmente entre jóvenes.
Trudeau, que enfrenta llamados dentro de su propio partido para que no busque un cuarto mandato, ha enfrentado crecientes críticas por sus políticas de inmigración y el impacto negativo que el crecimiento demográfico ha tenido en la asequibilidad de la vivienda.
El primer ministro dijo que las nuevas medidas pondrán un freno al crecimiento demográfico durante los próximos dos años. Canadá llegó a 41 millones de personas en abril. La población era de 37.5 millones en 2019.
El Ministro de Inmigración, Marc Miller, dijo que la reducción en la inmigración ayudará a enfrentar el problema de la escasez de viviendas en el país.
También reconoció el cambio en la opinión pública sobre la inmigración.
"Ese volumen que hemos presentado es preocupante", dijo Miller.
Una encuesta divulgada el mes pasado por el Environics Institute sobre la actitud de los canadienses con respecto a la migración, mostró que "por primera vez en un cuarto de siglo, una clara mayoría de canadienses señala que hay demasiada inmigración".
Un 58% de los canadienses considera que el país recibe demasiados inmigrantes, 14 puntos porcentuales más que en 2023, indicó el estudio.
Miller dijo que el gobierno ve las presiones que enfrentan los canadienses y que debe adaptar sus políticas en consecuencia.
Añadió que los líderes del gobierno han escuchado las preocupaciones y continuarán protegiendo la integridad del sistema de inmigración y haciendo crecer la población de Canadá de manera responsable.
"Somos un país abierto, pero no todos pueden venir a este país", dijo, señalando que Canadá seguirá dando la bienvenida a los extranjeros y que los objetivos de inmigración del gobierno siguen siendo ambiciosos.
El gobierno de Trudeau ha promocionado durante mucho tiempo la política de inmigración de Canadá y cómo Canadá es mejor que sus pares a la hora de recibir a los recién llegados e integrarlos a la economía.
Pierre Poilievre, líder del opositor Partido Conservador, acusó a Trudeau de destruir el consenso nacional sobre inmigración.
"Ha destruido nuestro sistema de inmigración a través de su propia incompetencia personal y destruyó 150 años de consenso de sentido común con los liberales y conservadores sobre ese tema", dijo Poilievre.
"No puede arreglar lo que rompió en materia de inmigración y vivienda o cualquier otra cosa porque está ocupado luchando en su propio grupo", añadió.
Poilievre se refería a los llamados de algunos legisladores del propio partido de Trudeau para no postularse para un cuarto mandato.
Esos llamados representan una de las mayores pruebas de la carrera política de Trudeau, pero el primer ministro dijo el jueves que tiene la intención de permanecer en el cargo hasta las próximas elecciones.
Nelson Wiseman, profesor emérito de ciencias políticas en la Universidad de Toronto, dijo que el gobierno de Trudeau cometió un grave error en materia de inmigración.
"La lógica del gobierno (hacer crecer la economía y sostener una población canadiense que envejece trayendo más inmigrantes jóvenes) era sensata. Pero Ottawa tiene poco control sobre la satisfacción de las necesidades de vivienda, salud, educación y otras necesidades de bienestar de los residentes, ya sean ciudadanos o ciudadanos o inmigrantes”, dijo Wiseman.
"Todas estas son responsabilidades del gobierno provincial y hubo poca cooperación o coordinación entre los dos niveles de gobierno", dijo.
Un cierto porcentaje de canadienses siempre ha sido xenófobo, pero mucho menos que en otros países, dijo a AP Wiseman.
“Muchos canadienses se han vuelto contra la creciente afluencia reciente de inmigrantes y trabajadores/estudiantes temporales debido a los crecientes desafíos en materia de vivienda, salud, educación y otros problemas de bienestar. Ottawa ha leído las encuestas y está respondiendo en consecuencia", afirmó.
Con información de The Associated Press y AFP.
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