¿La economía de trueques no fue tan común como pensamos?
En las sociedades de hoy en día es bastante normal preguntarse qué haríamos si no tuviéramos dinero, pero en este informe dicho planteo va un poco más lejos. La pregunta deja de ser sobre la persona y pasa a ser sobre las sociedades: qué haríamos si no existiera el dinero o cómo hacíamos cuando no existía el dinero.
Parte del análisis surge de las ideas de Adam Smith —filósofo, economista y escritor de « la Riqueza de las Naciones» entre otros libros— que dicen que básicamente antes de que el dinero fuera creado las economías de los pueblos se basaban en una economía de trueque.
¿Cómo funcionaban esas economías? Para simplificarlo se puede decir que, cuando una persona tenía, por ejemplo, tres vacas, y necesitaba una oveja, podía cambiar alguna de sus vacas por alguna oveja.
La parte complicada, según los críticos de la teoría, era encontrar a alguien que además de poder darle la oveja estuviera dispuesto a recibir una vaca a cambio.
Pero las personas de alguna forma debían conseguir lo que necesitaban. ¿Qué había entonces si no era una economía de trueques? Según algunos antropologistas en muchos casos llegó a existir una economía basada en la buena predisposición de las personas y en la preocupación que expresaban por sus propios vecinos.
La economía de los regalos
Supongamos que soy carpintero y necesito un poco de carne para comer. En una economía de trueque debería buscar a alguien que quisiera pagar por mi trabajo con carne para poder conseguir lo que quiero y además deberíamos de ponernos de acuerdo con las cantidades.
Según esta nueva teoría sobre las economías de los regalos (« gift economies») la cosa habría sido un poco diferente: en todo caso la esposa del carpintero tenía que ir a contarle a la esposa del dueño de las vacas que estaban necesitando carne para que le dijera «no te preocupes, puedes llevarte un poco de la nuestra», mientras que en un futuro si estas personas necesitaban un carpintero quienes se llevaron la carne harían ese trabajo para ellos.
Parece un poco rebuscado en el ejemplo individual, pero si lo trasladamos a las pequeñas comunidades puede tomar un poco más de forma.
Para seguir con el ejemplo, nuestro carpintero es el que se encargaría voluntariamente de todos los trabajos de carpintería del pueblo mientras las personas del pueblo se encargarían de que no le falte nunca la carne, los huevos o las verduras.
Lo mismo podría pasar con otras profesiones o servicios. La persona que contaba con las gallinas repartía los huevos entre las personas del pueblo y a cambio recibía carne del dueño de las vacas y la disposición del carpintero a brindarle su trabajo cuando lo necesitara.
¿Por qué se parece al trueque pero no es lo mismo?
Básicamente, en una economía de trueques las personas buscan o salir ganando de un intercambio o no salir perdiendo, además de que siempre existe un interés puramente individual.
Mientras que por el lado de las economías de regalos el interés cambia de foco: pasa a ser el interés por el bien de la comunidad y el interés por el bien de los vecinos. La persona no estaría ofreciendo huevos para que el carpintero le brinde su trabajo, sino porque no quiere ver a su vecino sufriendo.
Por un lado puede parecer una mirada un poco ingenua pero por otro lado parece tener sentido: si vivimos en comunidades pequeñas en donde nos conocemos todos es probable que nos preocupemos por el bienestar de nuestros vecinos.
La otra diferencia con las economías de trueque es que el trato pasa a ser afectivo. En una economía de trueques es probable que las personas pudieran negociar con personas que no conocen sólo para conseguir lo que necesitaban.
Sin embargo en una economía de regalos las personas en general siempre trataban con conocidos con los que habría un lazo afectivo, reduciendo las posibilidades de ser estafados, ya que en general nadie estafaría a una persona a la que conoce y aprecia, además de que la relación de intercambio no sería entre personas sino entre toda la comunidad.
Sin embargo quedan algunas dudas respecto a este tipo de economías.
¿Qué hacían cuando necesitaban algo y en el pueblo no había quien pudiera hacerlo o conseguirlo? ¿Los guerreros del pueblo atacaban al pueblo más cercano para robarle sus productos o se trataba de negociar con ellos?
¿Qué pasaba si una persona no tenía nada que ofrecerle a la comunidad? ¿Esa persona eran expulsadas o el pueblo se encargaba de seguir ayudándolo de todas formas?
¿Te gustó el artículo? ¿Crees que las economías de regalos pudieron existir realmente o te inclinas hacia las economías de trueques que describió Adam Smith?
Artículos recomendados: