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¿Son estos los peores inventos argentinos de la historia?

Publicado 3 Nov 2017 – 04:29 PM EDT | Actualizado 14 Mar 2018 – 09:48 AM EDT
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Uno de los motivos de orgullo más importante para los argentinos es haber creado algunos objetos que hicieron historia. Los ejemplos los conocemos todos y hasta se han compuesto canciones en honor a ellos.

Sin embargo, como en todo proceso de prueba y error hay éxitos y también fracasos. Lo cierto es que algunos inventos argentinos, lejos de ser motivo de orgullo, son un tanto insólitos o de poca utilidad real. Hoy recopilamos algunos para reírnos de los mejores peores inventos de la historia.

La tira roja de las galletitas

Irónicamente apodada « abrefácil», la tirita roja que sirve para abrir los paquetes de galletitas es uno de los inventos más odiados por los consumidores, que encuentran frustrante su mal funcionamiento. 

Fue patentada en 1878 en Argentina por el estadounidense Melville Bagley (sí, el de las galletitas). En aquel entonces, se utilizaba un hilo de algodón que se pegaba sobre un papel encerado para evitar que las galletitas se humedecieran. 120 años más tarde, todavía ningún invento logró reemplazar a esta tirita del demonio.

Los alfajores de fruta

En este caso particular, se trata de una simple cuestión de gustos, pero no hace falta ser un genio ni un encuestador profesional para darse cuenta de que los alfajores de fruta son la oveja negra del mundo alfajoril.

Para comprobarlo, solo basta con darle un alfajor a un niño y ver la expresión de desilusión en sus ojos al abrir el envoltorio y comprobar que es de fruta. No más pruebas, señor Juez.

La gaseosa con gusto a mate

En 2003, una reconocida marca de bebidas lanzó un nuevo y revolucionario producto: una bebida con gusto a mate, producida a partir de extractos de yerba buscando seducir al público argentino.

No hacía falta ser un experto para darse cuenta de que era una pésima idea. Un año más tarde, la bebida sería discretamente retirada del mercado para volver a donde siempre tuvo que estar: en el olvido.

Los caramelos Media Hora

No solo en Argentina hay divisiones políticas: la grieta también se hace presente desde hace décadas con los caramelos Media Hora. Con ellos no hay términos medios: o los amás o los odiás. Impasibles ante el paso del tiempo, los Media Hora continúan siendo objeto de debate entre millones de argentinos. ¿De qué lado estás?

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